Los accidentes que se producen por caídas a distinto nivel son unas de las principales causas de accidentes, muertes y lesiones irreversibles para los trabajadores. Por eso, contar con un buen modelo de Prevención de Riesgos Laborales en trabajos que se realizan en altura es fundamental si queremos garantizar una protección adecuada de la salud y seguridad de todos los trabajadores.
En numerosos sectores se llevan a cabo este tipo de trabajos donde un pequeño error puede tener consecuencias fatales. El análisis, desarrollo de medidas preventivas y la información y formación para los trabajadores sobre cómo realizar sus tareas de una forma segura es fundamental si quieren evitarse accidentes.
En este artículo explicamos qué se entiende por trabajo en altura, cuáles son los principales factores de riesgo cuando se realizan este tipo de trabajos y las principales medidas de prevención para evitar caídas.
¿Qué se entiende por trabajo en altura?
Se considera trabajo en altura a toda aquella actividad que se realiza por encima de los dos metros, abarcando tanto a aquellas que se realizan bajo o sobre el suelo. Podemos citar como ejemplos a aquellas tareas realizadas sobre un sistema de plataformas móviles, fijas o rodantes, los trabajos en pozos o excavaciones o en fachadas o estructuras en voladizo.
Este tipo de trabajos requieren un control muy especial porque cuentan en todo momento con una potencialidad de accidente que podría tener como consecuencia lesiones graves o incluso la muerte del trabajador.
Principales factores de riesgo cuando se realizan trabajos en altura
Cuando hablamos de factores de riesgo de los trabajos en altura es importante destacar que la propia altura a la que se realizan las tareas es un riesgo per se. De forma específica podemos diferenciar tres fuentes o situaciones peligrosas principales y varios actos peligrosos que se dan de forma habitual en este tipo de trabajos.
Fuentes o situaciones peligrosas que se dan en los trabajos en altura:
- Superficies de trabajo irregulares o inestables que pueden venirse a bajo o provocar un traspiés al trabajador.
- Falta de líneas de vida o puntos de anclaje para asegurar los arneses.
- Equipos de protección personal inadecuados, insuficientes o dañados.
Actos peligrosos habituales que suponen un riesgo mientras se realizan trabajos en altura:
- Una falta de verificación de la existencia de condiciones de seguridad adecuadas en el montaje de las plataformas de trabajo. Es decir, una comprobación de que estas sean estables y estén niveladas, cuenten con la instalación de una doble baranda, rodapiés. Así como una falta de comprobación del estado de las escalas, equipos y accesorios de la estructura.
- Falta de análisis de las condiciones ambientales de trabajo y, consecuentemente, falta de prevención ante situaciones como la intensidad del viento, lluvia, nieve, sobrecargas, etc.
- No utilizar o hacer un uso inadecuado de los elementos de protección personal o una falta de formación sobre cómo utilizarlos.
- Realizar actividades sin la autorización de la jefatura o supervisión
- Utilizar como superficie de trabajo los últimos peldaños de la escala o alejarse lateralmente del centro de esta para alcanzar el punto de trabajo.
- No contar con la aptitudes de salud para trabajos en altura.
Medidas de prevención para evitar las caídas en altura
Aunque han de desarrollarse medidas de prevención específicas tras analizar los riesgos asociados a cada puesto de trabajo mediante una Auditoría de Riesgos Laborales, existen una serie de pautas generales de seguridad a tener en cuenta:
- Utilizar equipos de protección anticaídas, tanto individuales como colectivos. La normativa establece que ha de primar la utilización de protección colectiva ante los equipos de protección individual.
- Limitar el tiempo de exposición ante el riesgo de caída al máxima.
- Para realizar tareas en altura se requerirá la participación mínima de dos operarios para garantizar la mayor seguridad y la posibilidad de ofrecer una asistencia inmediata si se produce un accidente.
- Ha de utilizarse el dispositivo específico asociado a cada línea de vida.
- Mantener el orden, limpieza y organización del lugar de trabajo.
- Ritmo pausado y uniforme durante el ascenso y el descenso.
- Limitar y señalar la zona de trabajo.
- Respetar las normas e indicaciones sobre la correcta ejecución de las diferentes maniobras.
- No utilizar el equipo anticaídas para otro uso diferente para el cual ha sido diseñado.
- Ofrecer una formación adecuada a todo el personal sobre el uso y manejo adecuado del equipo de protección anticaídas.